Generalmente, las casas de apuestas ofrecen varios tipos de bonos a nuevos usuarios para incentivarlos a depositar en el sitio.
Entre los bonos más comunes está el que ofrece el 100% del valor del primer depósito. Generalmente funciona así: el apostador crea la cuenta en la plataforma, deposita, por ejemplo, 100 pesos, y la plataforma acredita otros 100 pesos en la cuenta, totalizando 200 pesos de saldo.
¿Vale la pena aceptar este bono?
Es importante, antes de aceptar el bono, leer todos los términos y condiciones relacionados con esta oferta. Principalmente porque, en todos los casos, es necesario cumplir con algo llamado rollover antes de poder retirar este valor.
El rollover es una cantidad de dinero que el apostador necesita apostar antes de poder retirar el valor acreditado como bono en su cuenta. Este valor, el rollover, normalmente equivale a cinco veces (o más) la suma del depósito más el bono acreditado.
Entonces, si el usuario depositó 100 pesos, ganó otros 100 pesos de bono, quedando con 200 pesos de saldo. Si el rollover es de cinco veces la suma del bono más el depósito, significa que el apostador solo podrá retirar el bono después de realizar apuestas por un total de 1000 pesos (200 x 5).
Esto se debe a que la casa de apuestas ofrece el bono, pero pone dificultades para que puedas retirar el dinero.
Hay otros puntos a considerar en el cumplimiento del rollover: cuál es la cuota mínima exigida para realizar la apuesta y cuánto tiempo ofrece el sitio para poder cumplir con el rollover.
A pesar de estas dificultades para el retiro, se recomienda utilizar este valor del bono para probar estrategias mientras se cumple con el rollover. Se puede dividir este valor en unidades, haciendo una gestión de banca, y cumplir con el rollover poco a poco, con planificación, calculando cuántas apuestas por día es necesario hacer para cumplirlo dentro del plazo.
Vale la pena probar todos los mercados, goles, handicaps, al mismo tiempo que se practica la gestión de banca y el control emocional. En este sentido, es posible aprovechar el bono para entrenarte para ser un apostador sin riesgos, ya que el dinero fue ofrecido por la casa de apuestas.
Para apostadores más experimentados, que ya tienen métodos y estrategias, quizás no sea tan atractivo cumplir con el rollover, sino intentar tomar el bono y salir. Existe un método para esto, que es la apuesta contraria.
Método del Bono
El método consiste en hacer una apuesta en la casa donde el usuario recibió el bono y una apuesta contraria en otra casa de apuestas donde se pretende transferir el valor del bono.
Por ejemplo, hacer una apuesta en contra de más de 2.5 goles en la casa donde se obtuvo el bono y una apuesta a favor de más de 2.5 goles en otra casa de apuestas. La idea es perder la apuesta donde se tiene el bono y ganar la apuesta en el otro sitio. Sería una forma de "transferir" el bono de un sitio a otro sin necesidad de cumplir con el rollover.
Este método, sin embargo, tiene algunos inconvenientes. Puede ocurrir que el usuario gane la apuesta justamente en la casa donde obtuvo el bono. En ese caso, necesitará hacer otra apuesta, con valores mayores, para intentar transferir el bono nuevamente.
Otro problema es el Juice. Este término se refiere al porcentaje que las casas de apuestas ganan independientemente del resultado de las apuestas.
Para intentar transferir el bono de una casa a otra usando el método de la apuesta contraria, supongamos que se hagan apuestas con cuotas de 1.90 en una casa y también de 1.90 en la otra.
Inevitablemente se perderá algo de dinero al hacer esta apuesta. Esto solo no ocurriría si las apuestas se hicieran con cuotas de 2, ya que la apuesta ganada pagaría exactamente el valor de la apuesta perdida. Pero esto es casi imposible.
Por lo tanto, para que el método de la apuesta contraria valga la pena, es necesario elegir bien la apuesta y su respectivo mercado, para que las pérdidas sean lo menores posibles.